Las Mercancías Peligrosas son aquellas sustancias y objetos que presentan un riesgo para la salud humana o el medio ambiente. Estos artículos están sujetos a reglamentaciones internacionales que los clasifican según su peligrosidad.
Esta clasificación se conoce como el Código IMDG (Código Internacional para el Transporte Marítimo de Mercancías Peligrosas). Se trata de una guía para los transportistas y los operadores de embarque sobre la forma en que se deben transportar, almacenar y manejar los artículos clasificados como peligrosos para garantizar la seguridad de los trabajadores, la protección del medio ambiente y la preservación del patrimonio cultural.
La clasificación de las mercancías peligrosas se basa en los riesgos potenciales de cada artículo. Estos riesgos se dividen en nueve categorías:
- Grupo I: Materiales Explosivos
- Grupo II: Materiales Gaseosos
- Grupo III: Líquidos Inflamables
- Grupo IV: Sólidos Inflamables
- Grupo V: Materiales que contienen peróxidos, contenido fácilmente oxidable
- Grupo VI: Sustancias altamente tóxicas e infecciosas
- Grupo VII: Sustancias y materiales radiactivos
- Grupo VIII: Materiales Erosivos
- Grupo IX: Materiales y sustancias peligrosas de naturaleza diversa

Cada clase puede subdividirse en secciones más específicas, según la naturaleza exacta del riesgo.
Etiquetado y manipulación
El Código IMDG también establece cómo deben etiquetarse y marcarse las mercancías peligrosas. Las etiquetas deben reflejar con claridad:
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El tipo de peligro asociado
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Las instrucciones de manipulación
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La identidad del producto
Esto permite una respuesta eficaz ante cualquier incidente a bordo o en el puerto, además de facilitar la identificación rápida durante inspecciones o situaciones de emergencia.
En definitiva, la correcta aplicación del Código IMDG es esencial para garantizar la seguridad del transporte marítimo de mercancías peligrosas, protegiendo a las personas, los buques y el medio marino.
