El principal acusado por el caso del velero intervenido en 2011 en el puerto de Zumaia (Eukadi, España) con casi 600 kilos de cocaína ha sido condenado a penas que suman 19 años y medio de prisión por un delito de tráfico de drogas, otro de participación en grupo criminal y un tercero de blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico.
En un auto, la Audiencia de Gipuzkoa avanza las penas a las que han sido condenados los ocho procesados en este caso, seis hombres y dos mujeres, la mayoría de ellos residentes en Bizkaia, y cuya sentencia completa será dada a conocer en los próximos días. Todos ellos fueron juzgados en la Sección Primera de la Audiencia Provincial entre el 22 de septiembre y el 2 de octubre del año pasado, en lo que supuso una de las mayores causas de narcotráfico celebradas en Gipuzkoa.
Además de las citadas penas de cárcel, el cabecilla de la organización deberá abonar distintas multas por un importe total de 760.000 euros.
El resto de imputados: el lugarteniente de la banda, de origen colombiano; un ciudadano holandés que fue detenido en Zumaia en el barco ‘Catalejo’ en el que trajo la droga desde Venezuela; la exesposa del cabecilla de la banda; la madre de éste, el compañero sentimental de esta mujer, y otros dos procesados más han sido condenados a penas que oscilan entre los 3 y los 14 años y diez meses de reclusión, así como al abono de cuantiosas multas.
594 kilos de cocaína fueron intervenidos en octubre de 2011 por funcionarios del Servicio de Vigilancia Aduanera. Los miembros de dicho cuerpo sorprendieron a los dos tripulantes del velero ‘Catalejo’ que acababa de llegar al puerto de Zumaia desde Sudamérica.
El tribunal los considera, según los casos, responsables de diferentes delitos de tráfico de drogas que causan grave daño a la salud, pertenencia a grupo criminal y blanqueo de capitales.
En este mismo caso se encuentra procesado un noveno acusado, un ciudadano británico que sufre una enfermedad terminal y que se halla fugado tras ser declarado en rebeldía al no presentarse al juicio, quien presuntamente habría acompañado al súbdito holandés a bordo del ‘Catalejo’ en su viaje desde el Caribe.
La resolución, una vez sea notificada, puede ser recurrida ante el Tribunal Supremo
Los hechos enjuiciados se remontan a finales de agosto de 2011, cuando el velero partió de Venezuela con dos tripulantes a bordo, quienes al arribar a Gipuzkoa habrían alertado telefónicamente al resto de la banda para iniciar la descarga del barco.
Estos dos hombres fueron detenidos aquel mismo día en el puerto, mientras que el resto de la banda fue arrestada el 17 de diciembre en Bilbao en una operación en la que fueron registradas varias lonjas y viviendas donde fueron incautas distintas cantidades de dinero y droga, así como vehículos de alta gama y teléfonos móviles.
Durante la vista, que se celebró sin la presencia de uno de los tripulantes del velero, los acusados negaron toda vinculación con el caso. Aseguraron que el día de los hechos no viajaron a la localidad costera de Gipuzkoa y que tampoco tomaron parte las conversaciones preparatorias para el traslado de la droga.
El fiscal antidroga de Gipuzkoa, David Mayor sostuvo en su informe que los hechos estaban acreditados, la autoría demostrada y la culpabilidad contrastada. El ministerio público mantuvo las imputaciones para las ocho personas y reiteró su petición de penas, que totalizan 119 años.
Las defensas, por su parte, demandaron la absolución de sus clientes y solo el letrado que representa a uno de los tripulantes del velero en el que la droga viajó desde Sudamérica, pide tres años de cárcel.
La condena que se notificará mañana a las partes personadas por la Sección Primera de la Audiencia no es firme y con toda seguridad será recurrida ante el Tribunal Supremo, entre otros, por el letrado Javier Gómez de Liaño, defensor del principal encausado.